En ALGEDUC estamos convencidos de la importancia que tiene la naturaleza y los elementos que se encuentran en ella para potenciar al máximo las habilidades esenciales desde la educación inicial de manera sustentable.
A partir del 2023 incorporaremos capacitaciones que ayuden a los educadores a crear vínculos positivos en medio de espacios exteriores intencionados desde los primeros años de vida.
En la revista especializada en Educación Parvularia y Primera Infancia de la JUNJI, se demuestra que dichas prácticas favorecen el aprendizaje, aumentan las habilidades cognitivas, autoconfianza y autoestima, bienestar mental y emocional, gestión del peligro, conciencia ambiental y sentimiento de pertenencia, entre otros beneficios.
Adriana Gaete, ex vicepresidenta ejecutiva JUNJI y actual coordinadora de educación parvularia en ALGEDUC, asegura que “todo lo que hacen los niños cuando están afuera está enmarcado dentro de la actividad que por excelencia es el juego, por eso debemos aprovechar de presentarles escenarios que contengan piezas de la naturaleza para que constuyan ellos mismos sus propias dinámicas, incentivando así la creatividad, autonomía y trabajo en equipo”.
Existe una práctica que es alcanzable para incorporar de manera cotidiana en la rutina, pensada y desarrollada por el arquitecto inglés, Simon Nicholson, denominada “teoría de las partes sueltas”, que tiene que ver con explorar todo lo que se encuentra de manera natural al aire libre ,siempre y cuando sea fácil de recoger, mover, transportar, apilar, manipular, cambiar, etc.
Esto demuestra lo interesante que es para los más pequeños jugar con elementos reutilizables, ya que se dan situaciones increíbles que incentivan al máximo la imaginación. Una rama puede convertirse en una varita mágica o en un lápiz para dibujar en la tierra, o bien, pueden armar estaciones de salto con piedras donde se arma una competencia con reglas que ellos establecen, o crear una ciudad pequeña con hojas, entre otras tantas ideas que pueden surgir.
Lo fundamental es presentarles todos estos materiales de manera ordenada y organizada para que a la hora de estar en espacios al aire libre puedan transformarlo en lo que ellos quieran sin perder tiempo.
No es limitante que los centros educacionales cuenten con patios que estén hechos principalmente de cemento porque estos se pueden habilitar como verdaderos santuarios de la naturaleza. Una excelente alternativa es construir huertos sustentables de hierbas medicinales y culinarias, además de plantar vegetación, ya que a medida que se aumenta la diversidad de plantas, empieza a llegar espontáneamente un sinfín de fauna muy interesante, como insectos y aves para que los alumnos puedan experimentar este contacto de manera directa y en primera persona.
Otro beneficio importante que se ve reflejado en actividades como la descrita anteriormente, tiene que ver con formar seres humanos que tengan un apego y preocupación por el planeta, ya que conocen cómo son los procesos de regeneración del suelo, siembra y plantación, conviertiéndose así en verdaderos “jardineros sustentables”.
Josefina Prieto, Ingeniera Agrónoma PUC, experta en educación, vínculos y naturaleza, agrega que “siempre se habla del aula cuando el patio puede ser tan o más enriquecedor y significativo para los niños. Mostrar todas las cosas positivas que tiene el aire libre y derribar mitos en los docentes que temen que al salir no hagan caso, se escapen, les de frío o calor,etc, es nuestro objetivo central para que aprovechen todas estas oportunidades tremendamente enriquecedoras que ofrece este tipo de experimentación en espacios abiertos”.
Tomar riesgos, desde una perspectiva positiva, impacta efectivamente en el juego al exterior dentro de la educación infantil, puesto que provee de oportunidades para adquirir habilidades físicas, intelectuales y sociales, y además permite que el mismo niño o niña pruebe sus límites, favoreciendo un desarrollo óptimo (Little & Wyver, 2008), sentido de pertenencia, autoimagen y bienestar (Little & Stapleton, 2021).
La interacción en un ambiente libre, cognitivamente estimulante y desafiante, trae no sólo buenos resultados en el desempeño académico, sino que ventajas en el proceso integral infantil. Es por esto que queremos dar a conocer dichas prácticas en la mayor cantidad de establecimientos posibles, para así formar personas que tengan la oportunidad de desarrollarse al máximo mientras cuidan y tienen conciencia por el planeta tierra.