Prevenir el bullying comienza en casa: la alianza familia-escuela según Dan Olweus
- beadelriodom
- 5 jun
- 3 Min. de lectura
El acoso escolar o bullying, es un fenómeno complejo que requiere una respuesta integral. Su prevención no es tarea exclusiva de los docentes o del equipo directivo. Por el contrario, es fundamental promover una cultura de corresponsabilidad, en la que los apoderados desempeñan un rol activo y protagónico.
Uno de los programas más influyentes y ampliamente implementados a nivel mundial es el Programa de Prevención del Bullying de Dan Olweus. Este modelo, propone una intervención a múltiples niveles: escolar, de aula, individual y comunitario. Y hoy es posible desarrollarlo en los colegios de Chile, gracias a la alianza de Smart Learning y Algeduc.
En este artículo te contaremos cómo ha sido nuestra experiencia implementando el programa Olweus, y particularmente la participación con los apoderados.
Todo parte en casa
Un elemento fundamental del programa Olweus es la participación activa de los apoderados o padres y madres de los estudiantes. Lejos de ser actores pasivos, son considerados claves en la creación de un entorno seguro y protector para los niños y adolescentes.
El programa de Olweus reconoce que el comportamiento de los estudiantes está influido no solo por el ambiente escolar, sino también por las dinámicas familiares y comunitarias. Por ello, promueve una estrecha colaboración entre la escuela y los hogares. Desde la etapa de diagnóstico, que incluye encuestas a estudiantes para identificar el nivel y tipo de acoso existente, los apoderados son informados sobre los objetivos del programa y sus resultados preliminares. Esto fomenta una conciencia compartida del problema y motiva la acción conjunta.
“Es importante que los estudiantes reciban mensajes coherentes en su entorno familiar y escolar, por lo que el Programa de Bullying Olweus convoca a los padres y apoderados como actores fundamentales en la prevención y creación de entornos seguros” Gabriela Errázuriz, Directora Ejecutiva Algeduc
Una de las estrategias más importantes del programa es la realización de reuniones periódicas entre los apoderados y el personal escolar. En estas instancias se informa sobre las políticas contra el acoso, las normas de convivencia escolar y las estrategias utilizadas para abordar casos de bullying. Además, se capacita a los apoderados sobre cómo reconocer señales de que su hijo o hija podría estar involucrado en una situación de acoso, ya sea como víctima, agresor o testigo. Esta capacitación permite que los padres actúen de forma más informada, evitando minimizar o ignorar el problema, compartiendo definiciones y estrategias permiten tomar una postura común.
Metodología de trabajo con los apoderados:
El programa también alienta a los apoderados a fortalecer la comunicación con sus hijos, promoviendo la confianza y el diálogo abierto. Esto es esencial para que los niños y jóvenes se sientan seguros al contar sus experiencias y emociones. Al mismo tiempo, se busca que los padres refuercen en el hogar valores como el respeto, la empatía y la responsabilidad social, que son pilares fundamentales para prevenir el acoso.
En casos específicos de bullying, el programa contempla entrevistas individuales con los apoderados de las partes involucradas. Estas reuniones buscan establecer un plan de acción concreto, en el que la familia se compromete con medidas específicas que respalden el trabajo que se realiza en la escuela.
“A partir de nuestra experiencia implementando el Programa Olweus, los apoderados agradecen el poder contar con información clara y compartida sobre qué es y qué no es el bullying. Manifiestan una gran disposición a contribuir desde sus casas, conversando con sus hijos sobre el buen trato y respecto a la importancia de acudir a un adulto si saben que está ocurriendo.” Andrea Cox, Directora Académica Algeduc.
Testimonios apoderados:
Involucrar a las familias no solo mejora la eficacia del programa, sino que contribuye a construir comunidades escolares más unidas, empáticas y resilientes. Así, se avanza hacia el objetivo común de erradicar el acoso escolar y garantizar un ambiente educativo seguro para todos los estudiantes.
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